miércoles, octubre 11, 2006

AAD. Lunes 9 de octubre de 2006. Día 3

Ayer "sólo" tuvimos tres horas de Interpretación. No tuvimos Historia del Teatro, pero la recuperaremos más adelante. La profesora que nos da Interpretación los lunes es distinta de la que nos da los martes, y el método también es completamente distinto. Si los martes vamos a basarnos en la improvisación, los lunes nos basaremos en textos.
Creo que dije que para esta clase teníamos que llevar un texto de unas 8 ó 12 líneas para trabajar con él... bien. Yo estuve todo el fin de semana estrujándome la neurona para ver qué texto podría llevar... sin resultado. Al final, como algo tenía que llevar, me decidí por una parte del primer capítulo de "El grito silencioso", de Kenzaburo Oé. Lo bueno fue que, por distintas ocupaciones, el lunes por la mañana no pude ir a la biblioteca, así que tuve que ir a sacar el libro antes de ir a clase, mirándome los capítulos por el camino... Me tuve que sentar en un banco delante de la policía del CHF para copiar el texto, ya que había que llevar dos copias manuscritas. Durante el copieteo... pues pasó lo que suele pasar: un abuelete que pasa y se te pone a hablar contándote batallitas de cuando era jóven comparado con los jóvenes de ahora, gentes varias que se te quedan mirando como si aquello de escribir fuese la cosa más extraña del mundo... Total, que llegué algo tarde a clase, pero preferí llegar tarde con el trabajo hecho que no puntual y tener que estar haciéndolo en clase, ciertamente.

El texto es el siguiente:

"Se me acercó corriendo un perro negro que trataba de seguirme dando saltos, pero comprende enseguida mi rechazo y, sin una voz, se agacha, inmóvil, con el pequeño hocico saliendo en la oscuridad como un champiñón, mirándome. Lo levanto por los costados y avanzo despacio. El perro apesta. Quieto en mis brazos, jadea con vehemencia. Se me calientan los sobacos. Seguro que el perro tiene fiebre. Las uñas de los dedos de mi pie descalzo tropiezan con una viga de madera. Bajo el perro un momento al suelo, compruebo la posición de la escalera tanteando a ciegas, y luego, al palpar la oscuridad con los brazos en busca del perro, lo encuentro quieto donde lo dejé. Aunque no puedo evitar una sonrisa, no dura mucho. Seguro que el perro está enfermo."

Las tres horas de clase las empleamos al completo en trabajar los textos de cada uno, uno a uno. Trabajamos todos los textos menos el de S. Problema: S, F y yo escogimos algo literario, y teníamos que haber escogido un fragmento teatral. Solución: trabajamos el texto que habíamos llevado (algo teníamos que hacer en clase) pero hemos tenido que buscar otro texto, teatral, y mañana entre las 4 y las 5, es decir, fuera del horario lectivo, tenemos que ir a clase con ese texto y trabajarlo de la misma forma que lo hicimos el lunes. Tenemos que trabajarlo para estar al mismo nivel que el resto de la clase, ya que ese texto va ha ser el único que empleemos durante todo el primer cuatrimestre.

Intentaré resumir que empieza a ser tarde, mañana tengo que más o menos madrugar y también quería contar la clase de hoy.

El texto. Cada uno salimos y nos sentamos en una silla que está en el "escenario" de clase. Los focos (cegadores) están encendidos, y el resto de la clase está enfrente mirando, a oscuras. Lo primero es leer el texto al completo para saber de qué vamos a hablar. Después comienza el trabajo: las dos primeras líneas. Comenzamos con los signos de puntuación. La coma, que tiene que dar una idea de continuidad. El punto, con idea de fin (eso todo lo dominamos, pero lo de la coma... no). Las preguntas, tema denso. Si la pregunta comienza con una partícula interrogativa entonces tenemos que comenzar la frase marcando el carácter interrogativo y acabar la frase como si fuera afirmativa. Si no hay partícula interrogativa, hay que empezar la frase como si fuera afirmativa y acabarla marcando la interrogación. Si marcamos el caracter interrogativo al principio y al final, caemos en la redundancia. Bien. Una vez dominada la puntuación, pasamos a darle contenido a cada palabra. Pongo como ejemplo mi frase y la forma de trabajar.

Ert: se me acerca
Prof.: ¿cómo?
E: corriendo
P: pero ese "corriendo" tiene que tener un significado para ti, el que tú quieras, pero un significado
E: corriendo... corriendo... CORRIENDO... ¡corriendo!
P: desde el principio
E: se me acerca ¡corriendo!
P: cuántos
E: uno
P: tienes que buscarle significado a ese "uno" porque es "uno" no son dos ni tres ni cuatro, es "uno"
E: uno... uUno
P: qué
E: perro (dicho con un contenido, es decir, entonación, significado...)
P: cómo es el perro
E: ¡negro!
P: ¿cómo?
E: negro
P ¿cómo?
E: neeegro

No os pongo toda la frase porque es muy larga: hasta "...champiñón, mirándome.", pero el método de trabajo es así más o menos., creo que os podéis hacer una idea. Problemas:

E: me cuesta darle sentido a "perro"... para empezar porque nunca he tenido un perro y porque además me imagino lo que pasa en el libro, y el perro resulta que es su propio perro, sólo que en ese momento como él está mal, es de madrugada, su vida es oscura y todo lo que le rodea es oscuro, pues no reconoce al perro... pero si me pongo en la situación del hombre no puedo ver el perro como extraño, ¡es mi propio perro!
P: pero eso es fácil, imagínate que es un perro cualquiera que no conoces y que se acerca. Lo que estamos viendo está fuera de contexto, no hay que darle un significado más allá del que tienen las propias palabras

Como os podéis imaginar... estuve dos horas para hacerlo. Además es que no me gustaba nada como lo hacía, a lo que P. me decía "pero eso es lo que opinas tú, ¿y tú quien eres para opinar? una única persona, es decir, nadie (más o menos me dijo esto) eso es porque te escuchas, no te tienes que escuchar"... cosa imposible: no pude hacer el trabajo del texto sin escucharme. Otra cosa es que me dijo que estaba actuando pero no estaba interpretando. Yo dije: "ok". Y al minuto, le dije "pero es que entonces no veo la diferencia entre interpretar y actuar, para mí son lo mismo" a lo que me dijo que no, que son cosas distintas, que se puede interpretar y actuar a la vez ó hacer las dos por separado. A mí no me queda claro el asunto de momento, pero bueno, como nos dijo "os pediré que hagáis cosas que quizás ahora no sepáis muy bien lo que son, cómo hacerlas o lo que os estoy pidiendo, pero es algo que os pido que hagáis, aunque no lo sepáis, tenéis que lanzaros y hacerlo" y que más adelante ya sabríamos lo que era. Otra cosa que nos dijo fue algo así como que "aquí nada está mal, todo lo que se hace está bien, porque además, ¿quién opina que está mal? para hacer algo bien hay que haberlo hecho mal antes 1000 veces, y aunque digamos 'hacer mal' no es que sea malo, es que es bueno y necesario para aprender a hacerlo, porque si todos supiéramos hacerlo... ¿qué pintábamos aquí?". Chapó x2
Ah, también nos comentó que en esta primera fase íbamos a aprender más de lo que hicieran los demás que de lo que hiciéramos nosotros mismos, cosa que ha sido cierta. Cuando lo hacían los demás yo pensaba en el contenido que le daría a sus palabra, y si diría la frase así o asá. Pero al hacerlo yo... desastre, no me salía nada, intentaba darle un contenido pero es que no me gustaba, para mí noquedaba sincero y real. Que esa es otra, lo importante es que resulte creíble, y para eso trabajamos lode dar un contenido a cada palabra, pero yo si le doy un contenido a cada palabra no me resulta creíble... bueno, supongo que con el tiempo mejorará la cosa.

Ahora mismo no recuerdo más sobre la clase (es lo que tiene no escribir en caliente). ¡Ah, sí! hombreeeee nos dió deberes para que practicáramos en casa, tres ejercicios.

Para empezar las parte que trabajamos en clase (dos líneas o así) nos la tenemos que aprender de memoria (¡¡¡¡UFFFFF!!!! sudores fríos...) y luego:

1) decirla como si fuéramos un niño, es decir, tenemos que tener en cuenta el personaje comooriginal y distinto del original.
2) decirla con un estado de ánimo de tristeza
3) realizar una acción con mimo en las pausas de puntuación, que consistirá en fregar platos, es decir, empezamos fregando platos, paramos, interpretamos el texto hasta la primera coma, seguimos fregando, paramos, interpretamos otra parte hasta el siguiente signo de puntación, paramos, nos ponemos a fregar, y así sucesivamente... ¡BUENÍSIMO! y chunguísimo también.

Bueno, que ya he soltado bastante rollete. Cuento la clase de hoy en otro post, para dosificar un poco el tema. Sólo apuntar que al salir de clase estuve reflexionando bastante sobre lo que hicimos y lo que no supimos hacer... y que ayer por la noche con la ayuda de la peluchina mayor del reino encontré un texto teatral chulo :) También encontré un monólogo del club de la comedia buenísimo... antes de mañana tengo que decidirme por uno de los dos.

2 comentarios:

sunayani dijo...

Por qué texto te decidiste? Tienes que copiar el del club de la comedia, para que nos riamos un poco :)

Anónimo dijo...

Decidirme, decidirme, lo que se dice decidirme... digamos más bien que no tuve otra opción más que hacer el teatral, y que después al interpretarlo me di cuenta del por qué de la "no elección" :) El monólogo lo pondré aquí, junto con otro aún mejor que va de por qué las tías van de dos en dos al baño...